Es otro de los jóvenes jugadores de nuestro equipo que, día tras día, nos demuestra que lo tiene todo en sus manos para dar mucho de lo que hablar en el mundo del pádel. Trabajador, disciplinado y con las ideas muy claras, Alejandro Calvo quiere labrarse un nombre dentro de este deporte y, poco a poco, va dando los pasos necesarios para hacer realidad ese sueño.
Jugador valiente y sin complejos, el de Mengíbar no olvida que el pádel es un deporte de dos y, por eso, dentro de la pista se caracteriza por animar y por hablar en todo momento con su compañero… Porque la unión hace la fuerza y, cuando hay sintonía, la suma de 1+1 es mucho más que 2.
Con un gran margen de crecimiento aún por explotar, Alejandro Calvo nos deleita torneo tras torneos con esas bandejas tan precisas que ya forman parte de su ADN competitivo y, siempre dispuesto a progresar, sus esfuerzos se centran en mejorar su revés de defensa.
Muy feliz por formar parte del Team Cartri, el andaluz nos contó: “Para mí, es una gran satisfacción ser uno de los miembros de este equipo. Sin lugar a dudas, es una motivación para trabajar más. Sólo tengo palabras de agradecimiento por la confianza. En mi opinión, Cartri es una gran familia y ese es el factor que la diferencia del resto de las marcas”.
Con la pala Canyon en sus manos, está muy cómodo con su arma: “Por su espectacular balance entre potencia y control. Además, su peso la hace muy manejable”.
Ambicioso y con ganas de ir más, entre sus objetivos destacó: “Llegar a todas las fases finales de los torneos y, a nivel individual, ser un buen jugador y darle al pádel lo que el pádel me ha dado a mí”.
No podía ser de otra manera para alguien cuya filosofía vital tiene como uno de sus pilares: “Trabajar en silencio y que el éxito haga ruido”.
¡¡Vamos a por ello, Alejandro!! Las medallas se ganan en los entrenamientos; en los torneos, se va a recogerlas.
Así es Cartri… Make your way!!!
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